Nunca te pasó que cuando realmente dijiste: “¡Te voy a seguir Jesús, quiero saber más de vos!” y pensaste: “¡Me tengo que poner a leer más la Biblia!”. Este libro parece tan increíble, pero lo empezás a leer y te parece aburrido, no entendés que pasa, quién muere y quién no, era una cruz, ¿a dónde se fue? y llegaste a decir: ¡Yo realmente no entiendo nada!
La Biblia es la autoridad máxima de nosotros los cristianos, y no hay otra manera que como cristianos podamos perseverar en la fe sin tener un seguimiento con este libro, así que si nunca lo leíste, desafíate a leerlo de manera fácil, un capítulo por día.
Puedes comenzar por el libro de Juan, un capítulo al día, léelo todos los días; te va a tomar de cinco a diez minutos por día. Las cosas que te interesen, que te gusten y llamen la atención, lo que Dios te resalte, anótalas y subrayarlas, y vas a ver como ese libro que parece tan aburrido comienza a tomar vida. Te vas a encontrar historias impresionantes como la de 300 hombres que solamente golpeando cacerolas vencieron a ciento veinte mil, o donde un hombre abrió la boca de un león y lo destrozó, ¿Sabés por qué? Porque el poder de Dios estaba con él.
Te desafiamos a que si no sabés por dónde empezar, qué libro leer, comienza por el libro de Juan, y si ya tienes experiencia leyendo la Biblia pero querés ir más profundo en la lectura, te invitamos al siguiente curso que comienza en el siguiente episodio de esta serie.
La única manera que el joven puede caminar y seguir adelante es leyendo la Biblia. “Lámpara es a mis pies tus palabras y lumbrera en mi camino” (Salmos 119:105). Si realmente quieres caminar realmente en santidad, al lado de Dios mismo, no podrás dejar de leer este libro. Así que, si querés estudiar algo más profundo, mira el siguiente episodio.